27 de diciembre de 2012

La muerte de Winner


¿O debería llamarle asesinato?
 
Lloré y me enojé muchísimo. 

Parece ser que no nos alcanza con destruir su hábitat como para, encima, traerlos a vivir en cautiverio y bajo condiciones deplorables. Porque, por más que me hablen de "condiciones óptimas aprobadas internacionalmente", los osos polares nacieron en el Ártico para vivir en el Ártico.
Si tantas ganas tienen que verlos y tenerlos cerca, vayan al medio del Ártico, arriesguense a morir de hipotermia y aprecien la belleza de tales animales. Si quieren ver leones vayan al medio de la Sabana africana. Si quieren ver orcas hagan una excursión submarina en medio del oceano y ahóguense en el intento.

Los animales nacieron para ser libres. Es una falta de respeto total a la naturaleza secuestrarlos, extraerlos de su hábitat para encerrarlos y obligarlos a vivir una vida de mierda dentro de jaulas y lugares comunes adaptados (¡Si, claro!) a sus necesidades. 


Es una pena, pero cada día estoy más convencida de que los humanos somos el ser menos desarrollado y más estúpido de la Tierra. 
Somos la peor de las plagas. El veneno más potente.


LOS ZOOLÓGICOS NO DEBERÍAN EXISTIR.

EL SER HUMANO TAMPOCO.

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